Respondiendo a las peticiones del pueblo, voy a explicar por encima (porque podría tirarme horas escribiendo) las maderas que uso.
Las podríamos dividir en dos grandes grupos. Madera ya secada que compro importada de diversos orígenes, y madera verde que consigo dentro de España.
La seca es la que uso para las tablas de cortar, los muebles, las decoraciones de pared… Es madera que necesitas cortar, lijar, encolar, que no se mueva demasiado (dentro de que es madera y la madera se mueve). Yo siempre compro la madera en persona, eligiendo cada “palo”. Además las importadoras de madera son como el paraíso para mí… Decenas de tipos de maderas, en todas las medidas y formas que puedas necesitar. Me doy un paseíto (ya no me acompañan porque saben que soy un pesado y me tiro horas cotilleando) y cuando tengo elegido, me lo cargan al coche-furgo y para la nave. Maderas americanas que suelo comprar son roble, roble rojo, nogal, cedro, arce, cerezo… Allí tienen muy buenas maderas y la industria muy bien montada. Siempre que puedo en calidad FAS (significa firsts and seconds y es la madera de mayor calidad). Maderas africanas la bubinga, koto, mongoi, zebrano, jatoba… Alguna suelta de otras procedencias como la lenga sudamericana, la haya rumana, y el pino casi siempre español, que lo tenemos muy bueno.
En cuanto a madera verde, a veces encuentro gente haciendo masacres mal llamadas podas y ya que se están cargando al pobre árbol, por lo menos que no se lo lleven a Valdemingomez a pudrirse. Hay gente que me cobra algo, y hay gente que me dice que cuanto más me lleve, menos tienen que cargar ellos. Esta madera es buena para tornear. Se puede tornear también madera seca, y para según qué cosas es mejor, pero es una gozada tornear madera verde. Lo malo es que luego empieza la odisea de secarla sin que se deforme y raje demasiado. Es increíble hasta qué punto se puede deformar y rajar la madera si la dejas secar sin más. Ahora mismo tengo sicomoro, fresno, eucalipto, roble, encina, enebro, sauce, boj, y una madera que no tengo ni idea de qué es, pero que se tornea genial.
Las características que diferencian a las maderas son fundamentalmente la dureza, peso, el tipo de poro, color obviamente, y qué tal soportan los procesos de trabajo y acabado. Cada una es de una manera, pero por ejemplo el roble es tan poroso que si coges un trozo no demasiado gordo y lo soplas, el aire pasa tranquilamente y sale por el otro lado. La bubinga es un ejemplo de madera que si no fuera por lo bonita que es, la iba a trabajar Rita. No la puedes cepillar ni apenas fresar porque se astilla y desgarra. Entonces no queda más remedio que lijarla, pero es más dura que una piedra y te tiras horas. Además produce un polvo que no es de los agradables. La haya es un poco sosa, pero objetivamente es una de las mejores maderas. Es muy estable, de poro cerrado, y se cepilla, lija, fresa, corta y encola que da gusto.
Si queda alguna duda, o alguien tiene alguna otra curiosidad de maderas, máquinas o procesos que sigo, ponedlo en comentarios y responderé.