Bosques naturales es una empresa española que me contactó hace unos meses. Se dedican (espero no explicarlo muy mal) a gestionar plantaciones de árboles como inversión, cuya madera eventualmente se explotará. De entrada me interesó, porque cultivan principalmente cerezo y nogal, dos maderas que me gustan mucho, y porque la idea de por una vez gestionar bosques sostenibles y de buena madera en España, es muy buena.
Me invitaron a visitar una de sus plantaciones en Cáceres, y me asombró el mimo con el que cuidan a sus árboles, estudian cómo hacerles estar a gusto, que crezcan bien, que produzcan buena madera…
En cierta medida, esto tiene un componente de ensayo-error, y como tal, hay veces que cierto número de árboles tienen que ser cortados. Es una pena desaprovecharlos, y esta gente se planteó qué hacer con ellos. Una de las ideas fue fabricar tablero. Hacer tableros con cerezos de 5 años a priori es una idea descabellada, que si alguien me dice que se le ha ocurrido, me daría la risa. Pero resulta que lograron unos tableros curiosos, y de muy buena calidad. Sólo fue una primera prueba, por lo que aun mejorará, pero los tableros que tienen me gustaron, y no deja de ser cerezo, con el tono y veta que nos gusta de esa madera. Me pidieron que les hiciera algún mueblecillo con un par de tableros que tenían, y aquí veis el resultado. Espero seguir trabajando con esta empresa en el futuro, para ser partícipe de sus logros y ayudar a dar a conocer este nuevo tablero, que no sé qué os parece, pero a mí una chulada.
Lo primero fue unas peanas hechas con una técnica llamada “folding”, que consiste en cortar todas las caras en ángulo, de manera que al ensamblar, no se ve el canto en ninguna parte. Esto antes lo he hecho con la escuadradora a mano; no sé si recordáis unas peanas de OSB que hice para mi tienda, pero con el control numérico mucho mejor, claro…
Luego viene el tema de encolar estas piezas, con flejes para los cuatro costados, y gatos apretando las “tapas” contra este armazón.
El resultado final lo podéis ver aquí. Se me ocurrió fresar su logo, medio en cada peana, y luego pintarlo de blanco para resaltarlo.
Lo siguiente fue una mesita de café, que por su altura puede usarse de banqueta para sentarse también, y que tiene también las uniones a inglete, y otro corte a 45º decorativo en todas las piezas, delante y detrás. El logo aquí está fresado en un sólo trazo (en lugar de doble como en las peanas), y atravesando la pieza entera.
Por último, un cubo hecho con el tablero de cerezo, al que le metí dos elipses de nogal para darle un poco de gracia, y teniendo en cuenta que el nogal es la otra madera que comercializarán, aunque este nogal sea del que tenía yo por la nave.
Detalle del nogal:
Y nada, ahora está de camino a recogerlos el ingeniero forestal de la empresa con el que yo trato, que es un crack que sabe un montón de árboles, plantas y bichos, y que además tiene interés en dar a conocer el producto. Lo van a enseñar en su junta de accionistas, y espero que los muebles gusten, y que la gente pregunte “¿Quién os ha hecho estos mueblecicos tan majos?”.
Hola, me encanta tu trabajo, la calidad de la madera es muy interesante. Me gustaría saber cuánto costaría un banco de madera como el que muestras en esta entrada, con las siguientes medidas: 40x40x40 (forma cúbica). No hace falta que tenga absolutamente ningún adorno. El que pones en la foto lleva una elipse de nogal, me interesaría absolutamente liso, sólo con el detalle de las vetas de la madera, que me parecen espectaculares.
Una cuestión: no me importaría que fuera en una madera de peor calidad, para abaratar el precio.
Lo voy a utilizar como peana de una escultura.
Muchas gracias.