El cliente vio el mueble que había hecho hace poco en haya y nogal, y quiso algo muy parecido. Con roble en lugar de haya, y pensamos una pata un poco diferente.
En la balda central iba un portátil y se le ocurrió (cuando estaba todo ya diseñado y cortado, claro!) que estaría interesante que esa balda fuera corredera, para que pudiera sacar el portátil y teclear para poner las películas o lo que fuera. Por suerte di con una corredera que era menos ancha que el grosor de la balda, así que la pude integrar sin hacer mucho estrago. La verdad es que es una buena idea.
El mueble se terminó en barniz extra mate, y queda de lujo. Parece que no está barnizado y destaca mucho la veta. Aquí tenéis las fotos, y enlace a la página para ver su precio justo.