Bueno, esto es lo que hemos estado haciendo Salvatore (así se llama mi calibradora) y yo estos últimos días. Las tablas están en bruto, pero se ve el dibujo que tienen. Son bastante grandes, tendrán de media 42x32x4. Ahora falta redondearles el borde, poner patas a algunas, perfiles para agarrar a otras, y por supuesto darles el tratamiento que sacará a relucir la belleza de la madera, que en esta foto no se aprecia aun.
Y sí, esa morada es así. Es una sola pieza de 44x32x5 de una madera espectacular que tiene ese color natural. La “sosa” es de castaño, una madera que he descubierto que me gusta bastante para las tablas más sencillas, de las que voy a hacer una partida ahora.